Hay muchas cosas muy buenas que he jugado últimamente pero de lo que quiero hablar ahora es de la manera en la que Nintendo arrasó en el E3.
Definitivamente el 3DS ha asegurado las ventas de la siguiente generación de portátiles. Tuve la oportunidad de jugar Pilotwings y ver el avance de Legend of the Guardians. Tengo que aceptar que la tecnología 3D sin lentes no es perfecta, pero vaya que es buena.
La pantalla tiene que estar de frente ya que si se mueve el ángulo de visión se pierde el efecto 3D, pero al ser portátil es muy fácil mantener siempre un punto de vista que te permita disfrutar de la tercera dimensión.
Para uno que usa lentes es una bendición poder ver algo en 3D sin tener que usar los molestos lentes especiales, cuatro ojos son muchos, seis son una mentada de madre.
Si a alguien no le gusta esto del 3D simplemente tiene que deslizar un switch para regresar al ahora clásico estilo 2D al que estamos acostumbrados.
El 3DS no solo se basa en el truco de la pantalla, que por cierto ahora viene en formato 16:9, el procesador gráfico ahora es mucho más potente y cuenta con cámara externa doble para tomar fotos 3D, sensor de movimiento, conexión a Internet inalámbrica, un nuevo joystick análogo y lógicamente la pantalla táctil.
Todo esto en realidad no me emociona mucho, pero la combinación estos elementos sí emocionó a muchos desarrolladores por lo que la lista de juegos inicial es sorprendente. Títulos del calibre de Metal Gear Solid, Super Street Fighter IV y Resident Evil así como el tan esperado regreso de Kid Icarus. Si a eso le añadimos remakes clásicos como Ocarina of time cuesta trabajo esperar a comprarlo.Si esto no fuera suficiente también se podrán ver películas en 3D y quién sabe que tanto más logre hacer al final.
Definitivamente Nintendo seguirá dominando las ventas de los portátiles, pero esta vez lo hace dándonos lo juegos que tanto esperábamos poder llevar con nosotros a todas partes.
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